El pasado viernes 22 de noviembre tuvo lugar la conferencia “Gaming in Spain” que contó con la participación de la DGOJ. La primera de las ponencias de la conferencia corrió a cargo del Director General de Ordenación del Juego, Juan Espinosa. Bajo el título “Spain’s iGaming market: words and math for a viable future” la presentación planteó, a partir de una aproximación teórica de modelización del mercado de juego online, un análisis de la viabilidad del sector basándose los principales riesgos y oportunidades de actuación del regulador y del propio sector en el momento presente. Bajo esta perspectiva, el Director General apuntó que la viabilidad social del sector depende tanto de factores externos, que vienen en gran parte dados y sobre los que apenas existe capacidad de actuación, así como otros, estos sí, sujetos a algún tipo de afectación, en los que hay que focalizar la actuación del regulador.
Entre los primeros, se encontrarían factores tales como el propio crecimiento del sector, con un mayor impacto conforme su crecimiento sea mayor; la opinión pública, muchas veces basada en percepciones generales más que basadas en la experiencia; los riesgos inherentes al juego; así como la propia regulación, parte en la que destacó el escaso margen existente para el lanzamiento de iniciativas regulatorias en los últimos años.
Por otro lado, remarcó la existencia de variables sobre las que sí es posible incidir. Dentro de este ámbito, se enmarcarían actuaciones como la de desarrollo de políticas basadas en datos, así como el establecimiento de medidas predecibles, como pueden ser las relacionadas con el juego responsable y las respuestas de los operadores ante las distintas pautas de gasto de los usuarios, y que resulten exigibles por referencia a las obligaciones de diligencia contenidas en las licencias de los operadores.
Como último factor a tener en cuenta, se encontraría la efectividad de las propias medidas a poner en marcha, observable, por ejemplo a partir de una mayor capacidad de monitorización y en su caso sanción, así como el coste de implementación de la debida diligencia por parte de los operadores en cuanto a la detección de conductas problemáticas, siendo este un coste decreciente debido a la aplicación intensiva de nuevas soluciones tecnológicas.
La jornada abordó asimismo otros aspectos tales como el escenario regulatorio, la mejora del cumplimiento a través de las soluciones tecnológicas o el futuro de las restricciones a la publicidad en el juego, mesa en la que también participó el Subdirector General de Regulación, Guillermo Olagüe.
Berriren bat bilatu nahi badu zehazki, erabil ezazu Berri-bilatzailea